El vertido de la mezcla del hormigón fresco en el molde en las plantas de prefabricados debe realizarse en el menor tiempo posible, siendo los sistemas más habituales los cubilotes y las cubas aéreas. Los actuales sistemas de distribución del hormigón fresco permiten una distribución del hormigón de forma flexible y rentable a cualquier parte de la planta de prefabricados de hormigón que lo necesite. Los sistemas son muy económicos pues no necesitan de personal para manejarlos ni se requiere la capacidad de una grúa. Los sistemas no interfieren con el tránsito interno de la planta puesto que dejan el suelo libre para las operaciones de producción.
Las cubas aéreas (o vagonetas móviles) están disponibles en tamaños que van desde 1 a 3 m3. Están disponibles tanto para sistemas de raíl simple o doble, con controles totalmente automáticos o semi-automáticos. Las cubas aéreas son apropiadas tanto para tramos rectos como para curvos, pueden dominar pendientes e inclinaciones hasta un ángulo máximo de 10- 12º. La descarga de la cuba se produce por simple volteo.
Referencias:
ANDECE-STRUCTURALIA (2014). “Módulo 5 Fabricación. Curso de especialidad básica – Conocimiento de la construcción industrializada con prefabricado de hormigón o concreto. Maestría Internacional de Soluciones Constructivas con Prefabricados de Hormigón o Concreto”. http://capacitacionprefabricados.com/
Un cubilote es un equipo de trabajo consistente en un recipiente en forma de tronco de cono invertido de chapa de acero que se llena generalmente de hormigón y que, guiado por una grúa, permite hormigonar zonas de difícil acceso o transportar a las mismas diferentes materiales.
Esta forma de colocar el hormigón requiere el uso de una grúa y/o un blondín. El hormigón se vierte en el recipiente a pie de camión u hormigonera y, una vez transportado por la grúa y suspendido a poca distancia en vertical sobre el sitio donde se va a verter, se abre la compuerta inferior para verter la masa fresca en su emplazamiento.
La capacidad de los cubilotes puede variar mucho, de 0,5 m³ a 4 m³, en función del tipo de aplicación. La consistencia seca del hormigón no se adapta bien a este sistema de puesta en obra.
El tiempo de transporte mediante estos sistemas, sin agitación, debe limitarse a un periodo de 30 a 45 minutos, en función de las características del hormigón y de las condiciones climáticas. Es importante destacar que condiciones adversas, como el calor intenso, pueden requerir plazos aún más cortos.
Los rendimientos obtenidos con este método de transporte están condicionados por la distancia y el tamaño, y pueden variar desde los 7 m³/hora en el caso de las cubas más ligeras hasta los 20 m³/hora en los de mayor capacidad.
Os dejo a continuación un par de vídeos para que veáis cómo se coloca el hormigón con este equipo. Espero que os gusten.
Referencias:
ACI COMMITTEE 304. Guide for Measuring, Mixing, Transporting, and Placing Concrete. ACI 304R-00.
CALAVERA, J. et al. (2004). Ejecución y control de estructuras de hormigón. Intemac, Madrid, 937 pp.
GALABRU, P. (1964). Tratado de procedimientos generales de construcción. Obras de fábrica y metálicas. Editorial Reverté, Barcelona, 610 pp.
MARTÍ, J.V.; YEPES, V.; GONZÁLEZ, F. (2014). Fabricación, transporte y colocación del hormigón. Apuntes de la Universitat Politècnica de València, 189 pp.
TIKTIN, J. (1994). Procesamiento de áridos: instalaciones y puesta en obra de hormigón. Universidad Politécnica de Madrid. Escuela Técnica Superior de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos. Madrid, 360 pp. ISBN: 84-7493-205-X.