Los forjados de losa postesa o forjados postensados son forjados que han sido elaborados mediante la técnica de tesar cables de acero (armadura activa), después del fraguado del hormigón y cuando este ha alcanzado una resistencia suficiente para soportar las tensiones provocadas por dicho tesado. Se requieren hormigones y aceros de alta resistencia. Como consecuencia del trazado curvo de los tendones también aparecen fuerzas de desviación que pueden llegar a equilibrar el peso propio de la estructura, las cargas muertas e incluso parte de las sobrecargas. Existen dos variantes de la técnica: armadura postesa adherente y armadura postesa no adherente. Para forjados de edificación se suelen emplear armadura no adherente, por lo estricto de los cantos y por la facilidad de montaje. Este tipo de losas se utilizan en estructuras de edificios en altura, estructuras por debajo de la cota de rasante, cimentaciones por losa, parkings, puentes, depósitos, estructuras de edificaciones industriales, etc.
Algunas de las ventajas del uso de estos sistemas son las siguientes:
- Reducción de los materiales de construcción (hasta un 40% de hormigón y un 75% de acero).
- La reducción de peso de la estructura permite reducir el espesor y el armado de la losa de cimentación.
- Aumento de altura libre entre plantas al reducir a la mitad el canto de la losa comparado con un forjado tradicional.
- Continuidad estructural que permite un menor número de juntas de hormigonado y dilatación, así como una mayor integridad estructural.
- Reducción considerable del número de pilares y aumento de los vanos.
- Evita la aparición de fisuras y es impermeable al estar el hormigón comprimido.
A continuación os dejo algunos vídeos explicativos.